Fujifilm ha presentado su nueva cámara X-Pro 3 sin espejo que quiere homenajear a los fotógrafos clásicos. Fujifilm ha reinventado uno de sus modelos míticos sin perder la esencia de la fotografía clásica recordándonos a los telémetros que se solían emplear.
Cuenta con un sensor retroiluminado X-Trans TM CMOS 4 APS-C de 23,5mm x 15,6mm de tamaño y 26,1 megapíxeles de resolución. El procesador de imagen lo hereda de sus dos antiguos modelos Fujifilm X-3 y X-T30 y se trata del procesador de imagen X-Processor 4. Con el nuevo firmware instalado en la cámara se ha incluido el autofoco con detección de fase a -6EV de luminancia.
Una de las joyas del modelo de la Fujifilm X-Pro 3 es sin duda su monitor oculto y que le da ese aspecto todavía más analógico. Para acceder al visor hay que desplegar la visagra situada en la parte inferior del cuerpo de la cámara, de lo contrario el monitor queda completamente oculto para evitar distracciones durante el disparo.
El visor dela cámara también se ha mejorado al ser capaz de reproducir hasta el 97% de los colores del espacio sRGB. Es un visor híbrido de alta gama con 3.69 millones de puntos. Los usuarios pueden alternar entre el visor óptico(OVF) o el visor electrónico para consultar la exposición de la fotografía (EVF). Cuando usamos el EVF podemos acceder al modo Prioridad de suavizado, que elimina la imagen residual en fotografías de sujetos en movimiento rápido.
Con más guiños a la fotografía analógica, la Fujifilm X-Pro 3 incluye diferentes estilos de imagen que simulan los diferentes tipos de película. de esta forma no hay que hacer un revelado en RAW pudiendo trabajar directamente con archivos .jpg.
Saldrá a la venta a finales de noviembre en 3 modelos diferentes pero todas con revestimiento de titanio y tecnología DuratectTM para hacerla más robusta pero no pesada.